Un implante ocular, que según la FOSCAL causa serios riesgos de pérdida de la visión, estaría próximo a llegar al país. La institución alerta a autoridades y a la ciudadanía sobre sus graves peligros.
Como “una grave amenaza para la visión”, así ha clasificado la Clínica FOSCAL Internacional los implantes de iris artificial que cambian de forma permanente el color de los ojos, procedimiento estético que próximamente llegaría al país, según la institución.
Luego de llevar a cabo una investigación sobre este adelanto médico, la FOSCAL determinó que tal intervención produce un alto riesgo de pérdida de la visión, pues dicho objeto desencadena múltiples enfermedades en el globo ocular.
Tras los análisis de los oftalmólogos Virgilio Galvis Ramírez y Alejandro Tello Hernández, y de la doctora María Isabel Corrales, médicos de la FOSCAL, se encontró que el 68,8 % de los ojos en los que se implantó este dispositivo cosmético requirieron la extracción del mismo, debido a múltiples complicaciones.
“El estudio realizado evidenció casos de glaucoma secundario (elevación de la presión del ojo), inflamación en el interior del ojo (uveítis), cataratas, pérdida de la transparencia de la córnea, y un número considerablemente alto de estos pacientes (20,3 %) requirieron un trasplante de córnea”, aseguró Galvis Ramírez.
El galeno añadió: “además, en ocho ojos la agudeza visual final cayó a cuenta dedos, es decir, estos ojos quedaron legalmente ciegos”, afirmó este especialista.
A pesar de los serios peligros que halló este estudio de la FOSCAL, en países de América Latina, como en Brasil, este procedimiento quirúrgico se realiza de forma legal desde hace más de tres años.
Desde entonces, poco a poco este implante ha traspasado nuevas fronteras para ingresar a naciones como México y Argentina, en donde también se han reportado afecciones o enfermedades relacionadas a estos dispositivos.
El auge de este novedoso procedimiento estético ha prendido las alarmas en instituciones como la FOSCAL, ente que ya comenzó a alertar a las autoridades de salud y a la ciudadanía en general por la posible llegada de estos objetos.
“Afortunadamente en Colombia estos casos de implantes cosméticos aún no se han registrado, y lo que estamos haciendo es presentar a la comunidad los argumentos científicos para advertir sobre las graves consecuencias para la visión. Igualmente haremos llegar la información a los entes reguladores como el Invima, para evitar el ingreso al país de estos dispositivos”, indicó el oftalmólogo Alejandro Tello Hernández.