Se siente impacto al conocer a alguien que sin esperar nada a cambio, tiene el compromiso de someterse no a una, ni dos, ni tres donaciones de sangre de manera voluntaria. Han sido 70, solo motivado por brindar una oportunidad de vida a quienes más lo necesitan.
En un país donde es alarmante la escasez de donantes de sangre, Pedro Enrique Quiroga Yaruro podría ser considerado todo un héroe, por su contribución a salvar cientos de vidas con las 70 donaciones que ha realizado al Banco de Sangre.
Este fusagasugueño de nacimiento, pero santandereano de corazón, a sus 35 años de edad lleva 8 consagrado a realizar donaciones, principalmente de plaquetas sin tener ni idea a cuántas personas ha podido salvar.
La causa de Pedro Enrique comenzó en 2009, cuando a su papá, don Jesús Enrique, le realizaron de emergencia una cirugía de corazón abierto y perdió tanta sangre, que tuvieron que buscar casi que puerta a puerta 27 donantes que le devolvieron la vida.
Ese día entendió la importancia de la donación, al punto que se encargó de buscar donantes voluntarios entre sus amigos, quienes han seguido siéndolo por años.
Pedro Enrique sabe que sus buenos hábitos de vida le han permitido tener una condición física apta para ser donante y eso lo aprendió desde niño con el ejemplo de sus padres.
Entre los receptores de sangre y sus componentes están personas con enfermedades crónicas como el cáncer, por ejemplo, con linfomas o leucemias; mujeres con cánceres de mama que están en quimioterapia, cirugías cardiovasculares y los pacientes con trasplantes que, ante cualquier situación, pueden requerir de los hemocomponentes.
También se benefician las mujeres embarazadas que pierden sangre durante el parto, los heridos con armas de fuego o cortopunzantes en sitios cercanos a los órganos vitales o por traumas automovilísticos, por citar algunos casos.
Hoy en día, aunque Pedro Enrique sale con sus amigos, no consume más que dos o tres cervezas o un par de tragos de whisky; tiene una vida tranquila, es disciplinado en su trabajo y se siente feliz de ayudar a otras personas, como todo un héroe.
En FOSCAL contamos con un banco de sangre que suple las necesidades de hemocomponentes del 96% de las clínicas y hospitales del departamento de Santander, que consumen 8.800 unidades al mes.